18 dic 2009

Walking on a dream

Habìa estado planeando meticulosamente mi nueva entrada pero no puedo hablar ahora de nada que no sean los eventos de hoy. Son demasiado bellos, tan perfectos que me da miedo despertar subitamente y que el mismo recuerdo se haya esfumado.

Lector, ¿Alguna vez te has sentido tan feliz que debes pellizcarte para asegurarte de que no estas soñando? ¿Si pudieras regresar aunque fuera solo por un dìa a la època en que haz sido mas feliz, como si nunca hubiese pasado el tiempo, no lo aceptarìas con gusto y gratitud aunque quizà se evapore la mañana siguiente?

Hoy por primera vez en seis meses me sentì verdaderamente en casa. Lo que pasò entre nosotros desde que terminamos sencillamente desapareciò este dìa y entre sus brazos reconocì mi lugar. Todo lo bueno regresò de golpe a mi memoria, todas las cosas que amo de èl. En verdad parece que apenas ayer la relaciòn empezaba y hoy estuviese en esplendor. Llorè, como siempre cuando estoy muy feliz o conmovida y desee desesperadamente que el momento se detuviera para estar asì siempre. Las palabras parecìan sobrar mientras nos mirabamos y cada beso decìa mas que mil palabras, pero despertaba nuevas interrogantes. El sigue como me gusta recordarlo y todo estaba allì, intacto a pesar del tiempo, la distancia, las decisiones apresuradas y los malos entendidos. Por mucho que lo intentè està claro que no he olvidado en absoluto a este hombre.

El otro dìa cuando fui a ver Luna Nueva, recordè que yo le decìa que el era Edward. No pude evitar sentir el puñetazo del reconocimiento cuando èl la deja sin motivo aparente y la nostalgia total cuando se aclara la confusiòn y se confiesan que aùn se aman. Obviamente leer la novela hace tres dìas no ayudo mucho a quitar esa sensaciòn. El mismo "N" hizo una broma al respecto mientras nos abandonabamos a todas aquellas emociones que tratamos de sofocar todos estos meses. No me interesa en absoluto que haya hecho en este lapso, puesto que yo hice muchas cosas movida por la desesperanza. Lo que tengo claro es que no podrè mirar a nadie mas en mucho tiempo, a pesar de que no quedaramos en nada. A pesar de que no tengamos un tìtulo hay algo entre nosotros todavìa, o mas bien, de nuevo. Los dos tenemos muchas cosas que pensar y arreglar, pero hoy me quedò bien claro que el todavìa siente algo por mi y la simple idea me hace querer gritar de dicha (mas aùn que lo haya admitido y la desesperaciòn en sus besos y abrazos asfixiantes).

Escogì esta canciòn por que siempre que la escucho pienso en èl. Siempre estaba en el radio cuando salìamos a pasear en su Clìo, comiendo gomitas, platicando tonterìas mientras manejaba con una mano para tomar la mìa con la otra y acariciarla con el pulgar enguantado.

Si estoy soñando no me despierten. Tengo el presentimiento de que hay cosas en esta historia que aùn van a escribirse y me muero por seguir leyendo.

Walking on a dream by Empire of the Sun

2 comentarios:

Vicart dijo...

Por un momento pensé que habías programado estas entrada desde mucho antes, pero no, tu sueño es tan lucido, en hora buena, una de las tan tantas enseñanzas que nos ha dejado el cine es que en verdad si existen las segundas oportunidades para transformarnos y reinventarnos, yo también ando en eso de la reconciliación pero me a tocado la peor mejor época del año, disfruta tu estancia en casa, y pásate por el mío que últimamente como que me dan ganas de escribir.

Carolina dijo...

Pantera, ya te dije que quizás el círculo no se había cerrado y que era mejor dejar que las cosas siguieran su curso por sí solas, sin forzarlas.
Me alegra tanto que seas feliz...
Que dure, amiga, horas, días, o toda la vida, ¿quién sabe?
Carpe Diem!
Besos
El Halcón.