My sweet prince

Estoy muy enamorada y soy feliz. El hombre al que amo me sorprende cada día más, es un principe (nótese que no es azul, él viste de negro).

El Sábado fuimos a desayunar con su madre, quién, durante toda la velada, no dejó de interrogarme ni un segundo. Lo bueno es que hice mi mejor actuación de buena chica y creo que le causé buena impresión (toda la buena impresión que puede tener despues de encontrarnos solos y encerrados en el depa de él). Luego conocí a su tía, la cual ya sabía algunas cosas acerca de mí, y a otros familiares de menor relevancia. Al final me invitaron a la próxima reunión de la familia y creo que cuento con la gracia de su madre y su tía. Me gustó mucho el gesto de quererme presentar a sus parientes, verlo nervioso cuando platicaba con su madre y escucharlo decir que teniamos muchas cosas en común. El día fue estupendo por razones difíciles de explicar. Además, antes de salir a desayunar tuvimos una experiencia en cuestiones físicas en la cual yo lleve las riendas y el casi se consume de placer. Fue casi religioso, Amén.

No nos vimos el domingo, despues de vernos diario por mas de seis horas, por lo que el lunes ya estabamos desesperados. Ese dia, cuando nos acurrucamos en su incomoda cama, me preguntó algo que casi me hace desmayar de emoción y gozo. "¿Si las cosas siguen tan bien como ahora...vivirías conmigo?". El solo hecho de que nos vea futuro y esté lo suficientemente a gusto conmigo como para pensar en vivir juntos me dio ganas de correr por todo el departamento y gritar de felicidad. Ese día además, el hombre de hielo me dijo "Amor" por primera vez. Dice que jamás lo habia dicho a nadie, ni nadie se lo habia dicho.

Ayer cumplimos dos semanas de estar juntos oficialmente como novios y fuimos a Six Flags. Me divertí como loca y me parece que el tambien. El preparó unos sandwiches con la wafflera para comerlos durante el camino, que al final terminamos compartiendo con las palomas para poder entrar al parque. Nos subimos al Batman (compramos la foto y el me tomo la mano durante el recorrido), al Kilawea (espantoso), al Superman (¡fue genial!), al Curandero (la luna se veia lindisima), al Expreso Musical (varias veces, y alli lo acosé sexualmente, jeje) y al Vuelo Alpino (uno de mis preferidos). Tambien nos paramos en el puente del Splash a besarnos (hasta que nos cayó el agua helada encima), subimos al Carrusel a petición mía (se veia tan tierno en el único caballo negro y con cara de seriedad) y luego entramos a la Casa del Tío Chueco (donde nos usaron de conejillos de indias y el casi se quita los pantalones, sexy!). Al final me llevo a mi casa, y para comprobar no haber estado soñando le pregunté por que querría vivir conmigo...su respuesta fue adorable y la guardo para mi.

Hoy me dijo que me amaba, y por un segundo mi corazón se detuvo. No puedo pedirle más a la vida, de momento.

Colorblind by Counting Crows